"Hacele mimitos y listo": cómo actuaba la banda de viudas negras que cayó tras allanamientos en Quilmes
Los procedimientos los hizo la Policía de la Ciudad, luego de 7 meses de investigaciones. Fueron cuatro allanamientos en total: uno en Quilmes, otro en Ezpeleta y otros dos en la Capital Federal, más precisamente en Barracas y en el barrio 21. Se trata de una banda que drogaba con clonazepam y robaba a las víctimas.
Fuentes de la causa mencionaron que el primer hecho por el que investigaban a la banda "ocurrió en febrero de este año, donde un hombre contactó a una mujer por una aplicación de citas y como no reside en el país, la llevó hasta la casa de su hijo en Barracas. Tras drogarlo, la viuda negra se llevó dinero y elementos valiosos del hijo del damnificado".
El grupo delictivo utilizaba redes sociales y diferentes aplicaciones de citas para conocer a las víctimas. Una vez que ganaban su confianza, acordaban un encuentro íntimo. Iban a su domicilio, compartían bebidas en las que agregaban drogas para proceder a robarles con tranquilidad, dejando a la víctima inconsciente.
La Justicia intervino las líneas telefónicas y las conversaciones permitieron descubrir cómo operaba la banda. "Los diálogos interceptados entre los integrantes de la banda dan cuenta de la preparación de los golpes. Se escucharon frases tales como ´lo engatusa, lo gotea, lo duerme´ y como uno de los delincuentes recomienda a una de las mujeres cómo dejar a la víctima lista para ser precintado”, señalaron desde la Policía de la Ciudad.
Así, el juez Martín Yadarola dispuso órdenes de allanamientos: uno en barrio 21, otro en Barracas, otro en la avenida Iriarte al 3500 (Quilmes) y otro en Albert Einstein al 4800 (Ezpeleta). Como resultado del operativo, se detuvo a dos hombres de 22 y 26 años y una mujer de 29, acusada de ser la jefa de la banda de viudas negras. También se supo que se logró detener a otra mujer, pero se desconoce la edad.
Además, se ecuestraron un blíster de clonazepam, uno de Asolmicina.Dox y dos tiras de rivotril, que se suponen eran las sustancias utilizadas para dormir a las víctimas, siete recetas para la compra de psicofármacos, 20.900 pesos, tres celulares y un bolso con vivos verdes y blancos, que podría pertenecer a una de las víctimas.